viernes, 28 de febrero de 2014

Oración por los divorciados


He publicado unos seis o siete post seguidos acerca de la comunión a los divorciados. Es un tema importante, porque las cuestiones referidas a este sacramento son, literalmente, sagradas. Hoy querría seguir con esta serie de publicaciones pero con un matiz diferente. Se trata de una petición a los lectores. Es la de rezar por la gente que se encuentra en esta situación. Muchos son personas sencillas que han ido a parar a un destino al que le han arrastrado y que no habrían querido para sí. Pido una oración para su fortalecimiento, para su consuelo espiritual, y para que no se dejen arrastrar por la ideología de hoy en la que se toma el matrimonio como algo para toda la vida, hasta que las cosas vayan mal, claro. Una oración para evitar su sufrimiento, pero también para que se dejen iluminar por la Verdad: la verdad de que ellos tomaron una decisión y un compromiso libremente ante Dios, y ahora, aunque no convenga, tienen que cumplir con su parte. Oremos fuertemente para que su debilidad no sea la causante de su ceguera, y que sus deseos o flaquezas no sean las que configuren su concepto del bien y del mal. Por el contrario, que el recto entendimiento de estas verdades guien sus vidas. Qué dificil es, sin duda. Dios, dales fortaleza y que no sufran. Dales consuelo en estos momentos.

Me estoy acordando de Frank Morera, un apologista cubano del que me sorprendió saber de su situación sentimental. No sé qué le pasó pero el caso es que se separó de su mujer, y él, convencido de la nulidad de su matrimonio inició los trámites pertinentes. Tras mucho esperar, el Tribunal de la Rota no les dió la razón, así que Frank tuvo que aceptar esa realidad. Y viendo que su matrimonio, por las circustancias de la vida, quizás no porque él lo desee, no se puede recomponer, acepta que no se puede ir con otra mujer. No vivirá con su esposa, de cuya situación no tengo noticias, pero si su matrimonio no es nulo tiene que admitir que está separado, no soltero. ¿Entonces su vida no se puede rehacer? Pues la vida no se rehace. Se hace, aunque uno enderece el camino. Lo de rehacer es una mentira. Uno no puede borrar la realidad de que se casó porque la historia no tiene marcha atrás, ni uno tiene los años de antaño, ni su ex mujer desaparece de la faz de la tierra, ni se evaporan las posibles responsabilidades legales, e incluso las consecuencias, como los hijos que cualquier matrimonio puede tener (no estoy hablando de Morera, sino en general). Pero para Frank, el no estar con otra mujer no es una desgracia. Significa que sigue con su vida, feliz, pero que como católico que sabe que el matrimonio es indisoluble, vive con la coherencia que su fe exige, sin necesidad de tomar otra pareja. Y es que todos hemos de aceptar que tenemos limitaciones y circustancias que nos condicionan. Y por mucho que queramos escapar de la realidad a nuestro antojo, la realidad no se cambia. Una tendencia, o una querencia, no es un derecho. Si tenemos una tendencia irrefrenable y quizás incurable hacia el alcohol no podemos emborracharnos. Si no queremos tener un hijo, por dura que sea nuestra situación económica, no podemos abortar. Si tenemos una enferemedad grave no podemos exigir la eutanasia. Todo ha de estar sometido a la voluntad de Dios.

Con su permiso, Frank, me tomo la libertad de hablar de su caso, pues este testimonio es de mucha ayuda.

jueves, 27 de febrero de 2014

Casos lacrimógenos CONTRA la comunión a divorciados


Por las declaraciones del cardenal Kasper a Rome Reports sobre la comunión a los divorciados, se vé que la lógica y la realidad sobre la indisolubilidad del matrimonio y el sacramento de la comunión importan poco. Sólo valen los casos lacrimógenos, tal como se refería a ellos el padre Santiago Martín.

Pues voy a aportar dos casos lacrimógenos en contra de la comunión a divorciados.

El primero es real y guardo el anonimato de la protagonista. Una señora a la que dejó el marido, que se fue con la amante. En su sufrimiento preguntaba: ¿pero el matrimonio no es para toda la vida? ¿pero se puede o no romper? ¿entonces cómo me ha dejado? La señora murió en extrañas circunstancias.

Agravemos el caso e imaginemos que la buena mujer se encuentra todos los domingos a su marido en misa comulgando con la otra. Y sabiendo que todos dan por hecho que eso es normal. ¿Entendería algo la pobre? ¿Qué pensaría de la Iglesia? ¿Y qué entenderían o pensarían sus hijos ante esa tomadura de pelo?

El segundo caso no es real pero sí posible. Pongámonos en el caso de un sacerdote fiel que no puede dar la comunión en determinados casos sabiendo que cometería un sacrilegio. Pero resulta que un feligrés divorciado le exige como derecho el sacramento, aludiendo (verdad o no) que lo permite la Iglesia. El lío está servido para el desafortunado presbítero, que para evitar cometer sacrilegio va a pasar las de Caín ante su comunidad, y no hablemos ya si en la felonía participa el obispo. Y ante esta realidad, ¿cómo poder desenvolverse con normalidad en su ministerio? ¿se replantearía su vocación?

Pues dos casos, más que posibles, en los que pensar.

Ver también El universo matrix de la comunión a los divorciados o jamás podrán comulgar

El Universo MATRIX de la comunión a los divorciados


Sigo a vueltas con este asunto, porque es más que importante. Por dramáticos que sean los casos ocurridos, aunque uno no tenga culpa de que su matrimonio canónico se fuese a pique, el volverse a casar implica una no aceptación del matrimonio para toda la vida sin arrepentimiento. Y es que la aceptación de que el matrimonio es para toda la vida es incluso si tu cónyuge te abandona, porque lo que ha unido Dios no lo puede separar el hombre, a no ser que se demuestre que fue nulo. Pero si no es nulo, ese sacramento se torna en sacrilegio.

Pero hay algo que me sorprende: el universo Matrix en el que viven los obispos. Cualquier divorciado vuelto a casar puede comulgar de hecho cuando le dé la gana porque es raro que el sacerdote le conozca. Y aunque sepa de ese feligrés, ante la gran ola de apostasía generalizada, de seguro el sacerdote no pondría ningún impedimento. Es más, como ahora existe la figura del ministro extraordinario de la comunión, Paquita o Pepita le administrarían el sacramento sin problema alguno.

Además hay un gran desconocimiento de la realidad social de los divorciados. En su inmensa mayoría son personas que les importa bien poco pedir la nulidad de su matrimonio, y que no van a misa, pero no por problemas morales, sino porque les aburre. Pueden existir excepciones, pero excepciones son. Y quien no quiere ver esto, es porque está ciego.

Quizás el problema se plantearía en algunos pequeños pueblos con sacerdotes preconciliares, o en comunidades tipo los kikos, en cuyo caso la solución sería no asistir a misa en tu comunidad sino en la parroquia de al lado.

¿Y por qué esta preocupación por la comunión a los divorciados que tienen algunos ingenuos príncipes de la Iglesia, príncipes de Matrix porque no ven lo que pasa en la vida real? Pues porque el problema no es que los divorciados comulguen. El problema es que se diga que está bien que los divorciados comulguen. Y eso es lo que quieren y por lo que luchan una gran masa de ateos y neocatólicos a los que la comunión les da realmente lo mismo. No hablemos ya de los casos que se derivarían de admitir esto. Terminará dando igual el estado de la persona para recibir el Santo Sacramento.

Oremos.

Ver también Casos lacrimógenos CONTRA la comunión de los divorciados o Jamás podrán comulgar

lunes, 24 de febrero de 2014

Jamás podrán comulgar


La verdad es incómoda. Dos más dos son cuatro aunque nos duela. Por eso, aunque nos den pena algunos casos límite, el planteamiento de la Iglesia ha de ser el de buscar la verdad, por encima de las circustancias, y no el de saltársela, por misericordiosa que parezca esta opción.

Si tu matrimonio no es nulo y te vuelves a casar por lo civil, no es sólo que incumplas el sexto mandamiento, es que apostatas del matrimonio que hiciste para toda la vida. Por mala suerte que tuvieses, por sufrimiento que hayas padecido, por dura que sea la vida y por tremenda que sea la situación, esa realidad de que tu matrimonio no es nulo y de que no puedes iniciar otro, no se puede cambiar. Por tanto siempre será un sacrilegio comulgar en ese estado. Incluso aunque toda la Iglesia dijese que no es así, esa comunión será un sacrilegio, porque la realidad, la verdad, no es algo que pueda cambiar la Iglesia.

Dos más dos son cuatro. ¿Pero no es más misericordioso aceptar que en algunos casos sean cinco? ¿usted no cuenta con que es mucha cerrazón el porfiar sólo en el cuatro? ¿no puede haber excepciones? ¿acaso no tiene compasión de los que opinan que son seis? ¿no le conmueve el alma la situación de los que aseguran que son siete? Pero la verdad es incómoda y tozuda. Y por excepciones que queramos buscar, la realidad no cambia, y dos más dos seguirán siendo cuatro.

Oremos.

Un chiste

Que no hace falta estar de acuerdo. Y no ha sido así. Pero aquí está el chiste.


domingo, 23 de febrero de 2014

La comunión de los divorciados.


Otro vídeo. Suscribo todo lo dicho por el padre Santiago Martín. Sólo unas preguntas: ¿el cardenal Kasper fue el encargado de hacer la introducción en el consistorio por casualidad? ¿fue el azar el que hizo que él estuviese en la primera línea de este debate? ¿acaso eran desconocidas las posiciones de este cardenal sobre el tema?  Como dice Santiago Martín, recemos mucho.
VER COMENTARIO PADRE SANTIAGO MARTÍN

Padre Alfonso Galvez


Todos los domingos cuelga un vídeo en su página web. Pues yo os lo remito.

VIDEO PADRE ALFONSO GALVEZ

Pertenece a la página http://www.alfonsogalvez.com/es/

viernes, 21 de febrero de 2014

Cuento. ¿Quien quiere más a su Madre?


Una madre tenía cinco hijos: Pedro, Juan, Salvador, Manuel y Rafael. Eran muchachos con sus virtudes y sus defectos, que unas veces sabían ser generosos y otras no tanto, que unas veces estudiaban y otras les vencían la pereza, que unas veces se peleaban con sus amigos y otras sabían perdonar. Lo común en los niños.

La madre era santa y siempre practicaba el bien, con lo que se ganaba la admiración de unos y el desprecio de la gente que se aleja de Dios. Por esta razón, la madre les aconsejaba a los niños: sed buenos, sed mansos. Si alguien me critica, no respondáis. Si alguien me insulta, dejadlo pasar.

Pero transcurrieron los días y un muchacho del pueblo se mofó gravemente de la buena mujer cuando paseaba con sus cinco hijos. Pedro le devolvió el insulto, hecho ante el que la madre le corrigió. Sus hermanos apostillaron:

- Juan: no hay que dar importancia a un insulto.
- Salvador: pasa de él.
-Manuel: no das ejemplo de bondad.
-Rafael: al final quedas a su altura.

Todo quedó en nada. Pero pasaron quince días y se volvió a repetir el suceso. El muchacho arrojó una bola de barro a la cara de la madre que le manchó la cara, el pelo y el vestido. Ante esto, Pedro insultó con furia al gamberro, que se alejaba entre risotadas. Los hermanos volvieron a decir:

-Juan: No te sulfures.
- Salvador: piensa que es sólo barro.
- Manuel: está mal lo que ha hecho, pero también está muy mal tu actitud.
- Rafael: si mamá desea que seas bueno, comportándote así más que defenderla, la ofendes.

La madre llamó a la calma a Pedro. Le explicó que no podía reaccionar como había hecho. Pero la vida es testaruda y el gamberro de la bola de barro volvió a aparecer. Esta vez para empujar a la madre y tirarla al suelo, por pura diversión. Pero la reacción de Pedro no fue calmada. Se arrojó sobre él para pegarle. Por suerte los cuatro hermanos y la madre lo separaron a tiempo, con lo que el sinvergüenza huyó. Los cuatro hermanos le recriminaron con dureza:

-Juan: Qué Qué barbaridad, Pedro!
- Salvador:  Has demostrado ser un bárbaro.
-Manuel: Me avergüenzas.
-Rafael: Es increíble lo bajo que has caído.

La madre le hizo prometer que nunca lo haría: “Tienes un carácter y una forma de ser que tienes que pulir. En la vida hay que reaccionar de otra manera. No has hecho las cosas como debías, pero…” Y calló.
Calló, porque pensó: “no has hecho las cosas como debías, pero me quieres más que los demás.”

COMENTARIO: ¿No encontráis algún parecido en este cuento a la situación actual de los fieles con la iglesia? Quizás todos sean tan píos que las ofensas a Dios y a su Institución sean capaces de afrontarlas con frialdad inglesa. O quizás tienen horchata en la sangre… sólo para defender a Nuestro Señor, que no a sus intereses.

PD1. Por una extraña e indescifrable razón, el muchacho después de que Pedro casi le partiese la cara no volvió a meterse con la madre.

PD2. Cuando Pedro defendió con la espada a Jesús, habría que preguntarse si al Señor se le pasó por la cabeza algo parecido a lo que se le pasó a la madre del cuento. Y es que da que pensar que al final Jesús confirmase a este apóstol, con sus muchos defectos, como cabeza de Su Iglesia.

jueves, 20 de febrero de 2014

Pacifismo frente a Paz Cristiana.


Describir una ideología que pervive mucho tiempo es complicado, porque al final las acepciones y movimientos que de ahí nacen son tantos que cualquier definición general sería demasiado ambigua. Podríamos decir que el pacifismo es la querencia por la paz, pero si fuese así todos seríamos pacifistas a no ser que seamos psicópatas. Incluso los que inician guerras quieren la paz. Las guerras se inician no por amor a la destrucción sino por el ansia de conseguir un fin. Ya otra cosa sería ver si las causas para participar en una guerra, iniciándola o no, son legítimas.

Los dos pacifismos más significativos hoy día son el hippy y el de Gandhi.

1) Gandhi es el símbolo inequívoco del pacifismo. Pero es una figura política. No era alguien preocupado sólo de la religión o de que altruistamente nos ayudemos los unos a los otros. Era alguien que quería que la India se independizase de Gran Bretaña y para ello usó métodos fortísimos de presión, paralizando el país o poniendo en un brete al gobierno ante la desobediencia a la ley en masa, pero evitando heridos o muertos. Esto también hacía ganar legitimidad a los manifestantes, que no empleaban violencia, y ante los cuales toda actuación del gobierno autoritaria quedaría reflejada ante el mundo como desproporcionada.

Mejor está esto que una guerra, desde luego. Ya quisiera yo ese pacifismo en el cristianismo ante el aborto. Pero siendo sinceros, este tipo de pacifismo tiene algo de no pacífico. No se producen agresiones, pero sí serios métodos de coacción y de rebelión contra la ley. Para mí tendrán legitimidad según sus fines, pero llamarlo pacifismo me parece exagerado.

2) Luego vino el pacifismo hippie. No era tipo Gandhi, sino tipo slogan del  'No a la guerra'. Y ahí es inevitable hablar de las históricas protestas contra la guerra del Vietnam. Pero también hay en ellas algo que no encaja. Porque la guerra no la inició EEUU sino las guerrillas comunistas (el llamado Vietcong) para derrocar al gobierno sur vietnamita, y por alguna extraña razón, cuando los manifestantes protestaban por la guerra, no portaban pancartas contra Ho Chi Minh, el lider revolucionario que junto con otros inició la guerra.

En general todas estas formas de pacifismo son recogidas por la izquierda pues, como la paz es un fin noble, pueden hacer una lucha ideológica instrumentalizando este concepto. Por ejemplo, pueden iniciar coacciones y paralizaciones enmascaradas bajo la forma del pacifismo y deslegitimar así cualquier reacción de la autoridad competente. También pueden conseguir que cualquier intervención militar sea fuertemente denostada, incluso cuando su fin es evitar un proceso revolucionario. Por esto, hoy día, si miles de manifestantes queman o toman plazas, los gobiernos se encuentran sin autoridad para hacer nada, y los vándalos para permitirse todo.

Frente a todo esto está el concepto de paz cristiana. Es el deseo sincero de paz. Sin artificios. Pero sabiendo con sensatez que hay situaciones que pueden legitimar el participar en una guerra, siempre que no haya otro remedio. Por ejemplo, el de legítima defensa ante una invasión, o ante el no respeto de los derechos fundamentales del hombre por parte de un gobierno.

Pues esta postura de paz es más sincera y más sensata que las otras. Y lo peor, es que son instrumentalizadas buscando fines distintos a los de la paz. Y es que dicen del Diablo que es la mona de Dios, porque quiere imitarlo todo a su manera, pero resulta grotesco.

miércoles, 19 de febrero de 2014

Publicidad en Cope.


Es habitual la publicidad en las emisoras dada por los propios locutores. De hecho, en Cope, emisora propiedad de la Conferencia Episcopal Española, en el programa Tiempo de Juego, Pepe Domingo Castaño hace publicidad para luchar contra la eyaculación precoz.

En los primeros anuncios de Cope sobre el tema el presentador achacaba la culpa a problemas como el cambio de pareja y animaba a buscar una solución: "Hazlo por ti, hazlo por ella, hazlo por la vida, hazlo por la felicidad, hazlo por el amor, porque el amor amigo mio, el amor amiga mía, es algo... algo MARAVILLOOOSOOOO" . Y sonaba una musiquilla y cantaba.

Más adelante, con ayuda de los oyentes, en el anuncio se intercalaban otras canciones de manera humorística, en las que se rezaban frases como "mujer me estás pidiendo amor, y yo no puedo darte nada". También destacaba la celebérrima canción de Jeanette Anne Dimech con su "¿por qué te vas?".

Pero últimamente en la Cope, el tema que triunfa contra la eyaculación precoz es el españolísimo "no te vayas todavía, no te vayas por favor".

Pues nada, todo muy normal para una emisora católica.

martes, 18 de febrero de 2014

Imagen real de María Magdalena


¿Es esta la imagen real de María Magdalena? Pues podría ser perfectamente. Bueno, esta precisamente no, que es un retrato de la madre de Don Ramón Sans y Vilá, pero una similar, ¿por qué no?

Lo que quiero decir es que tenemos grabado indeleblemente en nuestras mentes la imagen de la Magdalena como la joven sensual seguidora de Jesús. Pero la realidad puede ser muy distinta. Es más, sería mucha casualidad que la realidad coincidiese con ese tópico.

¿Por qué? En los evangelios lo único que se dice de la Magdalena es que fue curada de siete demonios y que estuvo presente en la crucifixión y en algunos episodios concernientes a Jesús Resucitado. Sólo eso. A partir de ahí, es obvio que su apariencia y personalidad podría ser cualquiera.

Tradicionalmente los cristianos hemos asociado a María Magdalena con la mujer adultera, entre otras cosas debido a disquisiciones teológicas, pero lo cierto es que no hay ninguna constatación escritural de eso. La adultera permanece anónima en el relato. Pero incluso si fuese ella, ¿acaso ustedes no conocen a mujeres que han cometido adulterio poco agraciadas físicamente y mayores de cuarenta o cincuenta años? En el resto del Evangelio se habla de numerosas Marías, muchas veces identificándolas, muchas otras no, con lo que sería algo aventurado atribuir alguno de estos personajes a la Magdalena. Y de los apócrifos ni hablemos, ya que no se sabe ciertamente su autoría pero en la mayoría de ellos, por la terminología usada, se infiere que partieron de sectas gnósticas, llenando sus páginas con contradicciones y fabulitas de poca monta para niños.

Pues a borrar toda imagen preconcebida de Santa (recordémoslo) María Magdalena.

¿Es antievangélico controlar la Inmigración?


Lo primero, no admito sacar pasajes del evangelio que no tienen realmente nada que ver con el problema de un Estado con respecto al control de la inmigración, para decir que se han de abrir fronteras. Ni el buen samaritano ni ningún otro. También Cristo dijo no juzguéis y no por ello los Tribunales actuales son per se anticatólicos. Pensar eso es populismo o estulticia. Los despistados sobre este tema pueden pinchar aquí

Lo segundo, siento sincera compasión por los inmigrantes que pasan malos momentos en España, si esa es realmente su única escapatoria, ojo, de un mundo peor. Y creo que es nuestra obligación ayudarlos en sus necesidades. Pero, ¿no hay que plantear las cosas con lógica, viendo que podemos asistir a una verdadera invasión de catastróficas consecuencias?

En 10 años la población de España ha crecido 10 millones a pesar de que antes las familias eran numerosas y hoy apenas tienen niños. ¿A qué se debe eso? Los datos sobre inmigración falsean la realidad, dado que cuando hablan de inmigrantes no se cuentan a los numerosísimos que se han nacionalido españoles, que en muchos casos lo consiguen con una rapidez asombrosa. Y quien no vea esta invasión, es que no sale a la calle o es que vive en una urbanización de lujo.

¿Y cómo controlar este ascenso demográfico, combinado con la negación a prescindir de un estado social que nos cubra cuando nos desempleamos, nos dé sanidad gratuita, etc? Pues reduciendo la población a base de leyes del aborto, ideología de género, denostación del matrimonio, divorcio express, etc. ¿Qué pasa entonces? Pues que como el flujo de inmigrantes no cesa, poco a poco van a ser más ellos que nosotros. Y por supuesto nuestra cultura,  nuestro catolicimo, nuestra unidad ideológica frente a los atropellos del Estado, nuestro sentido de patria en la que se lucha por el bien común, todo ello, periclita.

¿No sería más lógico controlar la inmigración, que los nacimientos y la vida de nuestro país se desarrollen con naturalidad y sin artificios ideológicos antinatalidad, y que mantengamos nuestra cultura? Creo que los anticatólicos porfían tanto a favor de la inmigración porque los adalides de estas ideologías saben que así Europa pierde su identidad. Y al final estas ideas se pegan hasta a la gente de buena inteción.

¿Porqué exigirles a los países occidentales que acojan a los inmigrantes si eso perjudica gravemente a los occidentales y no soluciona nada a los países pobres? ¿No sería mejor crear una cultura de crecimiento y trabajo, así como una gobernabilidad estable, en los países pobres? ¿Por qué siempre exigen responsabilidades a los países a los que van los inmigrantes, y no a los países de donde han salido, que es donde está la raíz del problema? Yo sí lo sé. ¿Y ustedes?

sábado, 15 de febrero de 2014

CRISTO: "NO AL MATRIMONIO HOMOSEXUAL Y NO AL ABORTO"


¿Qué ocurriría si Jesús dijese textualmente NO AL MATRIMONIO HOMOSEXUAL O NO AL ABORTO?

Estas cuestiones no se dirimieron directamente en los Evangelios, pero se desprende su condena de observaciones indirectas de Cristo mismo, de las prédicas de Pedro y San Pablo, de toda la Biblia, y por supuesto de la Tradición.

Por ejemplo, si San Pablo condenó a los sodomitas y afeminados, es fácil adivinar su postura ante el matrimonio homosexual.

Pero, en todo caso, ¿qué ocurriría si Jesús se adelantase a su época y condenase textual y claramente el Matrimonio homosexual o el Aborto?

Pues que esto dirían los teólogos apóstatas.

1) En realidad ese pasaje fue añadido unos años después por primitivas comunidades cristianas.
2) La valoración de Cristo sobre el aborto y el matrimonio homosexual ha de enmarcarse dentro de la época, en el que el aborto era obligado por los hombres hacia las mujeres, no respetando su libertad, y en el que el matrimonio homosexual estaba basado en la lujuria y no el amor. Con lo cual las condenas de Cristo no son extrapolables a la época actual.
3) Cristo hablaba desde la mentalidad de la época, pero si Cristo hubiese vivido hoy, con una sociedad y circustancias distintas, estaría deacuerdo con el aborto y el matrimonio homosexual.
4) Estas consideraciones sólo estaban dirigidas a los apóstoles, pero no eran extrapolables al resto de seguidores, cuyas obligaciones, circustancias y compromisos son distintos, al igual que hoy día no son igual los compromisos de los laicos que de los sacerdotes. 
5) Etimilógicamente la palabra griega con la que Jesús parece condenar al matrimonio homosexual y al aborto también tiene otras acepciones. Por ejemplo la de la recomendación. Con lo cual no es tanto una condena como una simple recomendación, libre de seguir o no.

Me apuesto lo que queráis a que dirían esto. Y es que uno ya conoce demasiado bien las mentiras del enemigo.

jueves, 13 de febrero de 2014

El loco más genial de todos los tiempos


Puedo afirmar con rotundidad que Cristo escogió al hombre más genial de toda la historia. Con sus fallos, como humano que era, pero inigualablemente genial.

¿Y en qué consiste esta genialidad? Pues en lo que consiguió hacer. La Iglesia se formaba por doce apóstoles. También tenía seguidores, pero en un indulto público no consiguieron hacer que Barrabás fuese condenado en vez de su Señor. Por tanto, estamos hablando de una organización, que no ejército, bastante más que humilde. Y a San Pedro no se le ocurre otra cosa que ir a conquistar el Imperio Romano. Que se convierta, y con el Imperio todo el orbe.

Vamos a hacer un ejercicio de imaginación. Supongamos que un miembro de una humildísima comunidad de doce personas, llamémosle Pepito, tiene la genial idea de marcharse a Washington con la intención de que todos los EEUU sucumban ante sus nuevas consignas radicales, que supondrían una revolución ideológica tan extrema que pondría en peligro la unidad del país y la colaboración de sus satélites, a quienes no se les consentirían sus creencias autóctonas.

Y Pepito de excursión, se cree que cogiendo la mochila y aterrizando en Washington, va a hablar y hablar, a convencer a la gente, y a conseguir que los EEUU cambien por completo, y con ello todo el mundo. ¿Está loco o no está loco Pepito? Pues está para que lo encierren, pero si eso le sale bien podremos afirmar que estamos ante el hombre más genial que ha existido nunca.

Pues ese era San Pedro. A Roma se fue, sin importarle que lo mataran, a predicar el Evangelio y a intentar conseguir que Roma sólo confesase a Cristo. Sólo un Dios, sólo Cristo, y por tanto las demás divinidades a la hoguera, lo que supondría no sólo un gesto de dudoso ecumenismo, sino un gravísimo problema político para el Imperio, que tendría que luchar contra todos los fieles y todas las culturas que tuviesen otro credo, y muy probablemente perderlos como aliados naturales.

¿Y eso lo consiguió Pedro? Al tiempo sí.

Entonces, ¿es o no Pedro el hombre más genial que ha existido y existirá sobre la faz de la tierra?. Cristo se hizo Dios y encontró a este diamante. Genialidad también la de Cristo, aunque al Señor se le suponga todo extraordinario. Y encima Jesús hablaba de la falta de fé de Pedro. Pero claro, Jesús era Jesús. Que grande el uno, y qué Dios Nuestro Señor.

martes, 11 de febrero de 2014

El fariseismo actual


Se da hoy día que todo el mundo ve fariseos por todas partes. Lo cierto es que los progresistas ven en los católicos tradicionales puro fariseísmo, y los lefebvristas y sedevacantistas también ven a los conciliares como fariseos, acusándoles de tergiversar a su antojo la letra de los antiguos documentos pontificios para llevarse el gato al agua.

Para saber qué es fariseismo actual, sepamos qué es el fariseismo.

A) ¿Es el mucho apego a las tradiciones y a las formas?
No puede serlo en sí, porque el mismo Fransciso de Asis y Santa Teresa de Jesús lo tenían. Hay mucha hipocresía cuando se habla de las formas. Los progresistas acusan a los defensores de la liturgia tradicional de exceso de celo en este aspecto. Pero ellos también tienen ese celo, sólo que por formas absolutamente ordinarias (no uso el término de forma peyorativa), quizás por influencia del marxismo o de un extremo igualitarismo democrático. Nunca he conocido a un católico que se indigne fortísimamente por misas en las que las vestimentas o elementos litúrgicos no sean lujosos. Sin embargo sí he conocido a cientos de progresistas que se indignan por misas en las que las vestimentas o elementos litúrgicos sí lo son. Pues eso es que también les importan las formas. De hecho su radicalismo al respecto empequeñece al del tradicionalista más recalcitrante. Si no les importasen las formas les darían igual los zapatos rojos que los negros, o las casullas doradas que las simples, pero no es el caso ¿Serán al final los fariseos ellos? Salvemos a unos y otros de tal acusación puesto que es lógico ser consciente de que la forma importa, pues evidencia el contenido de la cosas y condiciona a las personas, por mucho que los despistados no se den cuenta.

B) ¿Es el mucho apego a la moral? ¿A la moral como ley?
Quien diga que el tener mucho apego a la moral es fariseismo, evidencia su amoralidad. Según esta premisa todos los santos serían fariseos. ¿Y es fariseismo entender la moral como ley? Pues la moral siempre se entendió como ley. O ando muy despistado o creo recordar que Moisés dió al pueblo judío las tablas de la ley, también llamadas los 10 mandamientos. O ando muy despistado o creo recordar que Jesús dijo a aquél hombre que le quiso seguir pero que al final no tuvo el corage necesario, que lo primero era cumplir todos los mandamientos. O ando muy despistado o Jesús dió el resumen de los Diez Mandamientos en dos, amar a Dios y al prójimo, con lo que legitimaba todos los anteriores y seguía dando a la moral carácter de mandamiento.

C) ¿Entonces qué es?
Pues el fariseismo es una secta religiosa judía de hace dos mil años con unas características y filosofías propias, no extrapolables en términos absolutos a la actualidad. En general estaban bastante corrompidos y Jesús los atacó fuertemente, pero también es cierto que su doctrina a veces coincide con la de Cristo y que no todo el monte era orégano. Lucas constanta, al menos tres veces, que un fariseo invitó a comer a su casa a Cristo. En una ocasión los fariseos advierten a Jesús de que Herodes Antipas trama su muerte (Lc 13,31). En el relato de la pasión no se hace mención de los fariseos aunque sí de los sacerdotes y ancianos. Nicodemo era fariseo, así como Gamaliel, que defendió a los apóstoles en el Sanedrín. Y entre los primeros cristianos había muchos fariseos, presumiendo de hecho San Pablo de su condición como tal (Fil 3,5).
En todo caso, aunque dentro del fariseísmo hubiese hipócritas, orgullosos, o corruptores del sentido de la ley (y/o de la moral), y todo esto pueda ser aplicable a gente de hoy, si queremos comparar el fariseísmo con filosofías actuales corremos el riesgo de malinterpretarlas, así como de malinterpretar lo que era esa secta de hace dos mil años y lo que Jesús reprochaba.
No es que esté mal seguir la ley, es que está mal no seguirla, sin importar esto en absoluto, mientras se es implacable con el prójimo.
No es que esté mal seguir la ley, es que está mal utilizarla a antojo para burlarla o exigirla según conveniencia.
No es que esté mal seguir la ley, es que está mal convertirla en puro formalismo con desprecio por el contenido.
No es que esté mal el formalismo, es que está mal utilizarlo para limpiar conciencias olvidándose por entero del contenido.

Y estos defectos en el fariseismo los podemos tener en parte cualquiera de nosotros, pero no creo que de forma tan exagerada. Muchos de estos llegaban a tener una auténtica enfermedad moral, por la cual para poder andar más de 900 metros de piedra a piedra en sábado, lo que estaba prohibido, arrastraban la piedra esa distancia y continuaban su camino. Por tanto no extrapolemos lo que no se puede extrapolar, y hablemos con sensatez de estos temas.

España y los políticos. Un análisis políticamente incorrecto


Este blog no acostumbra a hablar de estos temas. Pero es que es inevitable que fenómenos sociológicos como este del que voy a hablar adquieran una dimensión moral ante la que merece reflexionar. Y vaya por delante que ni simpatizo con ninguno de los grandes partidos, ni tengo ningún familiar que milite en alguno.

De siempre se ha repetido aquello de que 'todos los políticos son iguales'. Pero la verdad es que en España la sociedad sólo se ha preocupado fuertemente de este problema hace 2 ó 3 años, a excepción de la extrema izquierda y de parte de la derecha tras la patada en el tafernario que Rajoy dió a María San Gil, con la consiguiente deriva ideológica del PP. En general la sociedad opinaba que había una crisis que iba a pasar pronto y que la derecha crispaba el ambiente por su oposición al gobierno. Sólo dos años antes de la pérdida de las elecciones del PSOE la gente asumió la crisis y se la achacó a Zapatero. Y una semana antes del derrumbe socialista en las elecciones autonómicas, los indignados se manifestaron en la Puerta del Sol culpando de la crisis ya no a Zapatero, sino a todos los políticos. No era ya el gobierno el culpable, sino la oposición también, cosa sorprendente si no se descarta la malicia de la izquierda que sabía, como todos, que la derecha iba a arrasar electoralmente. Dado que el PP no gobernaba y que no se le podía culpar de nada, buen estrategia era generalizar contra todos.

Es legítimo tener criterios nefastos acerca de los políticos. Muchos muy acertados. Pero la mayor parte de la gente sólo repiten eslóganes populistas y estúpidos. Y lo peor de todo es que, a pesar de estar convencidos de la originalidad de sus ideas, son borregos que no saben pensar por sí solos ¿Por qué? Pues porque durante las dos legislaturas del PSOE casi nadie se pronunció sobre los políticos, y al día siguiente de la aparición de los indignados, España descubrió que el bipartidismo era el culpable de todos los males. No exagero en decir que el día de antes al 15M el único problema que veía la gente era la crisis y el paro, y que al día siguiente, casi todos alumbraban que era la corrupción o el sistema electoral. Y ahora que han pasado las elecciones eso último ha vuelto a olvidarse. Es gracioso que cuando el PP consiguió la mayoría absoluta, sus militantes en vez de euforia mostraban complejo en los foros sociales.

¿Qué es lo que esgrime el pueblo en contra de los políticos? Pues en líneas generales que todos son los causantes de la crisis, que ganan mucho dinero, y que todos son unos corruptos. Sin embargo las causas de la crisis son más complejas que un simple problema político, lo segundo es puro populismo, y lo tercero es imposible de generalizar, pues evidentemente no todos roban. Por supuesto sorprende la idolatría que se destila hacia la democracia y la fobia que se demuestra hacia sus representantes, teniendo en cuenta que no es posible que exista una cosa sin la otra. Incluso en las mal llamadas democracias asamblearias, mejor llamadas juntas jacobinas, tiene que existir la figura de los representantes que desempeñan el papel de lo que hoy conocemos como políticos. Podríamos entonces aludir a que hay excepciones, pero es que los populistas las niegan.

¿Y cual es el problema real de los políticos? Pues que en su mayoría son gente que está al nivel moral e intelectual de la sociedad que representa, y que sucumben a la ideología autodestructiva que en los últimos tiempos se está imponiendo. Sobre todo en los jóvenes sometidos a la ingeniería social de las últimas décadas. ¿Pero no son mucho mejores las personas comunes que los políticos? Quizás los políticos son algo peores porque el poder suele dañar el alma y porque son responsables directos de muchas decisiones, pero la diferencia no es tan grande. ¿No? ¿Acaso no hay gente muy buena por ahí? Está claro que hay muchas personas que en su día a día son buenos amigos de sus amigos y hasta generosos ayudando al vecino, pero esto seguro que también ocurrirá con la mayoría de los políticos. No me extrañaría que Zapatero o Iñaqui Urdangarín sean tíos simpatiquísimos en lo personal. Pero hay males endémicos, como las ideologías nefandas o una corrupción moral que evidencian lo emponzoñados que están políticos y sociedad. Tan populistas los unos como los otros, tan relativistas los unos como los otros, tan amigos del "bienqueda" los unos como los otros, tan enemigos de las leyes naturales los unos como los otros.

Así ambos, políticos y sociedad, caminan de la mano hacia un abismo moral. El pueblo juega a insultar a los gobernantes, y estos a intentar contentar a los votantes con vanalidades o veneno. Todos en un eterno indignamiento avanzan con paso firme hacia una sociedad muerta, mentirosa y estúpida. El individuo medio tiene padres que no se hablan, le faltan los hermanos pues la familia careció de sentido para ellos, no tienen hijos porque él mismo sigue estos criterios e incluso abortó, tampoco pareja que le quiera hasta el fin de sus días porque se ha dinamitado la estabilidad del hogar y del matrimonio, tampoco Dios porque es ateo, ni patria porque estas son cosas del pasado, ni ideología porque todas son malas, ni ganas de vivir porque ya nada tiene sentido, pero eso sí, tiene mucha indignación y odio contra la sociedad. Una sociedad por la que lucha fuertemente para que sea tal como viene siendo, y de la que cree que los únicos problemas a resolver son los relativos al dinero o a la salud. Y como falta sentido común y moral, cualidades que suelen ir parejas, ni eso consiguen.

Y todos asistimos no a un castigo divino, sino a un castigo humano, pues ha sido construido por nosotros mismos y tampoco es justo que nos quiten el mérito. Ojalá fuese un castigo enteramente divino porque así sabríamos qué hemos hecho mal. Pero no tenemos ni esa suerte. Todos en nuestra estulticia luchando por hacer del mundo un muladar, sin saber qué está pasando, por qué nos indignamos tanto, y por qué la vida se torna en un sinsentido.

lunes, 10 de febrero de 2014

La ONU es una hija de....


Recientemente la ONU ha emitido un informe al Vaticano exigiendo mayor colaboración sobre los casos de pederastia, y pidiendo a la Iglesia que cambie su posición respecto al aborto, los anticonceptivos, el matrimonio homosexual, etc.

Si sólo en el documento se refiriesen a los casos de pederastia se podría creer que la ONU tiene una intención legítima en defensa de los niños abusados. Hay quienes podrían hablar de juicio de valor injusto, dados todos los esfuerzos hechos estos años por la Iglesia por aclarar los abusos; de intromisión pues eso le compete a la justicia; de infamia encubierta al dar por cierta la acusación falsa de que la Iglesia no está haciendo lo posible, etc. Pero el asunto es de otra naturaleza.

Y el asunto es de otra naturaleza porque no se entiende qué demonios tienen que ver los casos de pederastia con la posición del Vaticano sobre la homosexualidad, el aborto, o los anticonceptivos. Y la ONU no junta todo en la carta por casualidad. Es porque así se forma una amenaza.

O ustedes cambian de postura, o empezamos a acusar a la jerarquía de encubrimiento de pederastas. Y nos da igual si es verdad o no. Vamos a ir a por vosotros a no ser que cambiéis vuestra posición. Y si la cambiáis, va a resultar que deja de existir el problema de los niños.

Esto apesta. La misma forma de hacer el comunicado no es sólo una amenaza injusta contra la Iglesia, sino una afrenta asquerosa contra los niños que han sido víctimas de abusos, a quienes se utilizan como moneda de cambio para conseguir los fines más espurios.

El hecho de que la ONU se atribuya funciones que no le son propias con el tema de los niños, que es cosa de los tribunales, desvela lo dudosísimas que son las intenciones de este organismo. Es como si el Vaticano ante esto respondiese a los parlamentarios con que revisasen sus declaraciones fiscales. ¿El mundo creería que esta exigencia nace del amor a la transparencia, o lo vería como una contestación a la amenaza? ¿Y por qué no se encarga de eso Hacienda? ¿Y qué pensaríais si los obispos acompañasen esa declaración de preocupación fiscal con una petición a la ONU de cambio de política reproductiva?

Más claro el agua. Qué asco de ONU.

JESÚS EN PROGRE


El progresismo tiene las ideas muy claras sobre Jesús y sobre la Iglesia. Por su coherencia sabemos que dicen la verdad. Paso a detallar sus pensamientos y sus tesis histórico-filosóficas.

Jesús tenía una relación con María Magdalena. Aunque también es cierto que la tenía con San Juan, porque aquello de "discípulo amado" debe indicar una relación homosexual. Aunque también es cierto que los evangelios son muy poco fiables en términos históricos. Aunque también es cierto que Jesucristo no existió. Pero a pesar de su no existencia es seguro que estuvo con María Magdalena.

También es seguro que era comunista. Está claro por los evangelios. A pesar de que no tienen ninguna fiabilidad y de que Jesús no existió. Pero era comunista. Aunque también le molestaba mezclar política y religión y dijo aquello del 'dad al César lo que es del César'. Pero era comunista.

Como decía, a pesar de lo poco fiables que son los evangelios y de que Jesús no existió, sabemos perfectamente que durante todo el tiempo en el que no hay documentación sobre su vida, estuvo recorriendo Oriente y recogiendo sus filosofías. Sorprendentemente estas filosofías coinciden con el comunismo.

En todo caso y afortunadamente, hay una solución a la falta de fiabilidad de los evangelios y a la no existencia de Cristo para saber qué hizo realmente. Todos los escritos apócrifos no avalados por la Iglesia, son 100%. fiables. Excepto en la parte piadosa y donde se narran milagritos. Ahí fallan terriblemente. O eso, o son metáforas. Como en los evangelios, donde todos los milagros son metáforas. Y es que siempre debemos hacer una exégesis inteligente y sagaz de estos textos que al final nos lleven a la conclusión de que Cristo era un revolucionario social, y que todo milagro era una metáfora. Gracias a esta exégesis hallaremos la verdad profunda de los Evangelios, los cuales por cierto no tienen ninguna credibilidad.

En todo caso disponemos de otras fuentes fiables. Leonardo Da Vinci pintó un cuadro de la última cena unos 1450 años después, con lo que es lógico pensar que ahí se refleja con exactitud lo que pasó en el siglo primero. Y además ¡¡es que sólo mirarlo está tan claro!! Entre otras cosas el San Juan de la pintura, al no tener barba, es María Magdalena, lo que prueba infaliblemente la relación de la Magdalena y Jesús. Después de todo, si fuese el imberbe del joven San Juan, también demostraría fulminantemente una relación homosexual. Ambas cosas son seguras.

Hay otras fuentes muy fiables sobre Jesús, como el libro "Caballo de Troya", de J.J Benítez. Abunda la documentación que demuestra que Jesús era un extraterrestre de izquierdas que luego se nacionalizó norteamericano y que nunca existió, cuyo mensaje ha sido profundamente tergiversado por la Iglesia, que no tiene ni idea de lo que habla.

Y es que la Iglesia es muy carca y se ha alejado del Evangelio, que por otra parte es un texto que no tiene ninguna credibilidad. Tiene que volver a sus orígenes. Y adaptarse a lo que piensa la gente de hoy. Por tanto tiene que hacer ambas cosas. Volver ideológicamente hasta hace dos mil años pero avanzar ideológicamente a lo que piensa el hombre del siglo XXI. Sin olvidar que Jesús hoy sería de izquierdas pero que pasa de la política y de las ideologías.

¡Si supiese esto la Iglesia! Demasiados fallos tiene. Por ejemplo, es una idólatra que no sigue lo que predica el Antiguo Testamento de no hacerse imagen alguna. También debería de hacer su culto el sábado como los judíos, y no el domingo. Jesús reprocharía a la Iglesia por este rompimiento de la tradición, aunque a su vez Jesús fuese un revolucionario que rompió con toda tradición. Pero a su vez fue un judío muy fiel. Y de filosofía oriental. Y también el típico comunista apolítico del siglo XXI. Si me apuras era hasta ateo. Siempre riendo, muy enrollado y simpático. Excepto con la Iglesia. Ahí demostraría toda su furia.

Y es que ni siquiera sabe la Iglesia que todas las religiones son buenas. Y por cierto, a la vez las causantes de todas las guerras. Y la Iglesia católica la peor. Por eso hemos de respetarlas a todas. Y por eso lo que hizo Femen con Rouco está muy bien. Femen es tan ejemplar como el Che Guevara. Por cierto, qué mala es la violencia y las guerras. Seguro que el comunismo produjo guerras porque Cristo era comunista. O sea, por la parte religiosa que le toca, porque todo el mundo sabe que la izquierda es siempre pacífica y democrática. Las guerras las traen las religiones y las ideologías. Todas las ideologías son malas. Por lo tanto la izquierda y el progresismo no deben de ser ideologías. Es mejor no creer en nada. Excepto en el matrimonio gay, la libertad de elección a la hora de abortar, que el estado sea laico, que el capitalismo es atroz, que la democracia es lo mejor pero que todos los políticos son execrables, etc. Pero salvo todo eso, no hay verdad alguna. Por eso es lamentable que la Iglesia se crea en posesión de la verdad. No hay verdad. Y que no hay verdad es una verdad absoluta. Eso y todo lo anterior.

San Pedro y el Ecumenismo


domingo, 9 de febrero de 2014

Hola amigo. ¿Sabe usted que su mujer es una ramera?


Suena la puerta. Es un señor desconocido y empieza a hablarte.

   Señor: Hola amigo.
   Tú: Hola, ¿qué desea?
   Señor: Vengo a contarle la verdad. Porque usted ha vivido engañado muchos años.
   Tú: ¿Cómo? ¿A qué se refiere?
   Señor: ¿Sabe usted que su mujer es una ramera?
   Tú: Pues no tenía ni idea. Pero me parece muy interesante lo que me dice.
   Señor: Pues lo es, lo que pasa es que le tiene a usted engañado durante mucho tiempo, y en su bondad usted no se ha dado cuenta.
   Tú: Qué cosas. Continúeme contando.
   Señor: Pues le contaré otra cosa más. Usted idolatra a su madre, que no es ni mucho menos tan buena como cree.
   Tú: ¿Mi madre? ¿En serio?
   Señor: Sí. Y tengo múltiples pruebas que prueban lo insana que es su relación con su madre y lo fulana que es su mujer.
   Tú: Qué interesante. Pase, que le invito a un café.
   Señor: Claro, claro. Así le puedo detallar la cantidad de mentiras que le ha dicho la golfa de su mujer, lo equivocado que ha estado usted todos estos años, y lo malvados que son sus hijos.
   Tú: Ahhh, ¿mis hijos también? Pues no lo sabía. Pero si usted tiene pruebas yo me lo creo.
   Señor: Sus hijos los peores. Son para tirarlos por un puente.
   Tú: Qué alegría que usted me está abriendo los ojos.
   Señor: Pues sí. Más vale que no les vea nunca.
   Tú: Claro. Si es que tienen muchísimos defectos.
   Señor: ¡Y tantos!
   Tú: Siga contando, por favor ¿Quiere más café?
   Señor: Nonono. Muy rico el café, pero me tengo que ir ya. Le dejo una revista mía donde cuento con detalle todo esto que le he dicho y volveré mañana por la mañana a hacerle otra visita. ¿Le viene bien?
    Tú: Estupendo.
    Señor: ¡Adiós!

¿Te ha gustado el diálogo? Cambia las palabras esposa, madre o hijos por Iglesia o Virgen María y verás el típico diálogo con los protestantes o testigos de Jehova. Si no darías credibilidad a esos juicios contra tu familia, ¿porque hacerlo cuando lo hacen contra tu Fe?

sábado, 8 de febrero de 2014

¿LO IMPORTANTE EN RELIGIÓN NO ES LA ENTREPIERNA?


Siento el título del post. Pero es que así lo repiten constantemente algunos sacerdotes, que aunque tengan buenas intenciones, creo que andan despistados. No dicen que la cuestión sexual se deba obviar, sino que hay cuestiones más importantes que el sexo. Y estoy de acuerdo. Pero descuidar ese tema, más hoy día, me parece un gravísimo error. Se ha de insistir más que nunca. No ya sólo por el hecho de que todo pecado mortal nos lleva a la condenación. Ni siquiera porque sobre esta cuestión el mundo apostate como nunca. Es por todo eso, pero también PORQUE LA SEXUALIDAD CAMBIA A UNA SOCIEDAD Y SU MORAL POR COMPLETO E IRREMEDIABLAMENTE.

¿Creen que la sexualidad es una cuestión irrelevante? ¿Y porqué esa beligerancia en todos los temas sexuales por parte de los enemigos de la Iglesia? ¿Sería exagerado decir que el 70% de su lucha por cambiar la sociedad está encaminada por ahí? ¿Por qué una beligerancia tan extrema en cuestiones que para los despistados les parecerían cosas solamente de lo íntimo del dormitorio?. Pero ya ven que es así. Luchan por el homosexualismo, por los cambios de sexo, por la anticoncepción (incluido el aborto), por el cambio del concepto de matrimonio, por el divorcio, por nuevas formas de unión en pareja, porque la mujer y los hijos adquieran un nuevo rol dentro de la familia, por la hipersexualización de la sociedad, por implantar una educación sexual en las escuelas destinada a la introducción de nuevos valores a los niños.. ¿TODO ESTO ES CASUALIDAD? Las serpientes astutas se dan cuenta de la importancia de este asunto, mientras que las ovejas bobaliconas permanecen en la inopia.

La sexualidad en su más amplio aspecto conlleva consecuencias en todos los aspectos de la sociedad, en todos los aspectos de la moral, y en todos los aspectos de la religión.

    A) ¿POR QUÉ LA SEXUALIDAD CAMBIA LA SOCIEDAD?:
          - Porque una errónea sexualidad destruye la familia: la hipersexualidad (promocionada por todos los medios de comunicación, organismos internacionales y gobiernos) lleva a la infidelidad; las relaciones prematrimoniales ofrecen al mundo formas de convivencia en pareja ajenas al matrimonio y a la intención de tener hijos; la homosexualidad legitima el sexo con fines ajenos e incompatibles a la procreación; el matrimonio homosexual desvirtúa el concepto de matrimonio reduciéndolo a mera afectividad con independencia de la procreación; los métodos anticonceptivos (incluida la monstruosidad del aborto) consiguen el mismo fin: el divorcio no sólo rompe el matrimonio, sino que disuelve de por sí la definición de matrimonio como unión para toda la vida; el saber que el matrimonio puede romperse hace que las parejas vean inconvenientes en tener hijos, o al menos, más de uno; el saber que el matrimonio puede romperse sirve de acicate para que las parejas adquieran nuevas formas de unión menos comprometedoras; al adquirir un nuevo rol la mujer y los hijos en la familia, es más difícil que ésta se estructure de forma jerárquica, que es lo que en todas las organizaciones permite un funcionamiento óptimo (así ocurre en los estados, en empresas, en centros educativos... ), etc.

         - Porque la familia destruida cambia la sociedad y su moral: Se reduce el número de nacimientos y por tanto la composición demográfica de la sociedad; los niños al crecer en hogares desestructurados tendrán menos posibilidades de tener una formación en valores tradicionales y/o religiosa, formación que por lo común se transmite de padres a hijos; esto conlleva a que los eduque con mayor facilidad el Estado; al ser los niños criados en familias desestructuradas su propia sexualidad y moral pierde referentes, y desconocen por parte de sus padres la imagen de la familia y de los valores sexuales-afectivos tradicionales; al reducirse el número de nacimientos, prevalecen los inmigrantes con otras culturas distintas a la cristiana, dividiendo y neutralizando una unidad ideológica, moral o religiosa de la sociedad frente al estado, etc.

       - Porque cambia la esencia de la persona: La sexualidad nos define en todas las facetas de nuestra personalidad; Una sexualidad desordenada nos cambia por completo, pero en el caso de la homosexualidad la esencia es cambiada extraordinariamente; esto afecta también a los heterosexuales, pues pierden buena parte de la referencia social de "hombre" y "mujer"; Los hijos de familias desestructuradas tienen una visión de la vida y unas expectativas en la forma de afrontar su futuro sentimental muy distinta. Etc.

        - Porque en una generación se hace casi imposible retomar la moral y sexualidad anterior: El matrimonio es una opción poco apropiada para las personas educadas bajo una perspectiva nueva; significaría renunciar al tipo de vida sexual con la que uno ha crecido; la perspectiva de fracaso matrimonial es tan grande que no interesa comprometerse; etc.

    B) ¿POR QUÉ CAMBIA LA MORAL Y LA RELIGIÓN ?

        - Por todo lo dicho anteriormente, que no vale la pena repetir.
        - Porque al no quedarle más remedio a la sociedad que aceptar este modo de sexualidad, para querer ser coherentes con su vida rechazan los valores tradicionales.
        - Porque al rechazar los varlores tradicionales, rechazan a la religión, portadora de estos. Lo pueden hacer de forma parcial gravísima (implicaría aceptar como legítimo un pecado mortal, y muy probablemente el sacrilegio de comulgar sin importar los pecados, con lo que la eucaristía se reduciría a un mero acto social, y el sacramento de la confesión prácticamente desaparecería), o de forma total.
         - Porque como consecuencia, al final habrá una ruptura de la sociedad con la religión o una transigencia de la religión hacia los valores del Mundo. Si la religión cede ante la sociedad, la religión dinamita su propia esencia, los textos sagrados que la mantienen, la unidad ideológica que forma un cuerpo doctrinal coherente... Se convertiría, pues, en una cáscara vacía reducida a la superchería y sin nada que ofrecer a la persona. Por tanto se condenaría a su casi total desaparición a medio-largo plazo.

¿Importa o no importa esta cuestión?

miércoles, 5 de febrero de 2014

La interesante forma de hablar de Cristo.


Cristo era sabio. Lo reconoce el título de mi blog y cualquiera. Y su sabiduría queda reflejada no sólo por lo que dice, sino por cómo lo dice.

Es curioso cómo cuando los sacerdotes reflexionan en las homilías sobre la razón por la que Cristo hablaba en parábolas, aducen que es por la incultura del pueblo sin caer en la cuenta de que Cristo explicó sus razones en Mateo 13, 15, que como verán no tienen nada que ver con estas teorías.
       
       "Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible y con dificultan oyen con sus oídos; y sus ojos han cerrado, no sea que vean con los ojos, y oigan con los oídos, y entiendan con el corazón, y se conviertan, y yo los sane"

Esto tiene más sentido, sobre todo por dos razones: porque las parábolas son más complejas de entender que cualquier sentencia taxativa (de hecho los apóstoles preguntaban a Cristo por el significado de alguna que otra), y porque entre los religiosos judíos abundaba la cultura, aún sabiendo que es lógico pensar que los seguidores de Jesús fuesen un grupo heterogéneo.

¿Y qué es lo que quiere decir Jesús con su respuesta? Pues piensen que alguien en su cerrazón se niega a reconocer que el cielo es azul. Imaginen que tiene prejuicios y que demonizará a quien asevere esta verdad. Alguien sabio en vez de caer en su juego y dar una sentencia que el obtuso pueda anatemizar, le levantará con la mano la barbilla para que mire arriba y caiga en la cuenta de su error. Si bien es cierto que Cristo también afirmaba verdades determinantemente cuando lo creía oportuno, esta sana astucia a la hora de actuar es una constante en el Señor.

Ejemplos de esto hay en abundancia. Jesús en vez de caer en la controversia diciendo a los judíos que paguen los impuestos de Roma les respondió con su celebérrimo "dad al César lo que es del César". En vez de teorizarles farragosamente sobre la necesidad del perdón les narró la esclarecedora parábola del funcionario que no quiso perdonar. Y en vez de iniciar su singladura evangélica autoproclamándose como Dios mismo, fue primeramente haciendo milagros, mostrando la Verdad, y lanzando semillas para que en los corazones naciese el fruto.

Se ha teorizado mucho sobre el autoconvencimiento progresivo que tuvo Jesús de ser quien era. Creo que estas tesis demuestran escasa sensatez y escaso conocimiento del modo de actuar de Nuestro Señor. ¿De verás Jesús poco a poco se dio cuenta de Quien era? Pero si en la anunciación a la Virgen, el ángel Gabriel ya dijo que sería la madre del Mesías, el Hijo de Dios; si los Reyes Magos trajeron al Niño de Belén oro, incienso y mirra; si Juan el Bautista saltó de alegría en el seno de su madre al ver a María, a quien la reconoció Isabel como "la madre de mi Señor"; si San Juan Bautista dijo de Cristo que era el Mesías.

Cristo sabía de siempre quien era. Pero si lo revelaba abiertamente antes de iniciar sus años de predicación lo hubieran tomado por un loco o por un ególatra. Él prefería hacerlo poco a poco, ir sembrando, haciendo milagros, mostrarles lo que es la Verdad, y dejar que la gente fuese tocada por el Espíritu.

No se lo reveló directamente a Simón. Dejó que su apóstol lo dijese, y en ese momento le cambió el nombre a Pedro como primado de su Iglesia:
          "¿Qué dice la gente sobre el Hijo del Hombre? ¿Quién dicen que es?. Ellos le respondieron Unos dicen que es Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías o alguno de los profetas. Y ustedes, les preguntó, ¿Quién dicen que soy?. Tomando la palabra, Simón Pedro respondió: Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo. Y Jesús le dijo: Feliz de ti, Simón, porque esto no te lo ha revelado ni la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en el cielo. Y yo te digo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder de la Muerte no prevalecerá contra ella. (Mateo 16, 13-18)

Hubo, eso sí, un momento crucial en la Vida de Cristo en el que se produjo esa misma situación a la inversa y en la que el Señor tomó la delantera y se reveló como Hijo de Dios y como Dios mismo. Cuando le juzgaban en el Sanedrín y le preguntaron quien era. Se jugaba su vida: "¿Eres tú el Hijo de Dios?" Y Cristo, parafraseando a Dios ante Moisés en la zarza ardiente dijo: "Yo Soy". En hebreo Y H V H. Pronunciado, Yahvé. Era uno de los apelativos con el que los judíos se referían al innombrable Dios. Caifás entendió muy bien las palabras de Jesús y se rasgó las vestiduras al grito de "Blasfemia!"

Ese era Jesús.

martes, 4 de febrero de 2014

Condena a la homofobia del cardenal Sebastian


Sabrán a lo que me refiero. Lo de siempre. Un obispo se pronuncia acerca de la homosexualidad y se le tacha de homófobo. Pero creo que hay un matiz más preocupante que en los últimos años. El problema no está en el cariz de las declaraciones, sino en que se quiere vetar la visión objetiva de la homosexualidad. No digo ya un juicio de valor, sino una definición cierta. Aséptica.

Hemos sido bombardeados de tal forma con propaganda progre que no es de extrañar que muchos lectores sean incapaces de leer este post sin que sus prejuicios veten cada frase que escribo por miedo a caer en la homofobia. El sólo hecho de pensar sobre la naturaleza de la homosexualidad les molesta. Prefieren pasar.

Por esta razón no voy a caer en el juego de decir frases tabús, con lo que se demonizarían mis intenciones como excusa para no reflexionar sobre el tema. Sólo animo a pensar a los lectores poniendo unos cuantos ejemplos:

¿Qué es una nariz grande? Es tan sólo un rasgo físico. Quizás no normal.
¿Qué es una nariz desorbitadamente grande? Hablariamos de deformidad. Ya es algo más preocupante que el hecho de no ser normal.
¿Qué tal creerse Napoleón? Un transtorno mental. O una enfermedad.
¿Cómo se calificaría la apetencia de lentejas? Como gusto, opción.
¿Y de naranjas amargas? Otra, tan válida como la otra, aunque menos común.
¿Y si te gusta comer madera? Ya hablaríamos de un transtorno.
¿Si te gusta el vino? Eso ya vuelve a ser simple gusto.
¿Si eres adicto al vino? Enfermedad.
¿Si siendo adulto adquieres el rol de un niño? Un transtorno.
¿Si eres hombre y te gustan las rubias? Un gusto personal.
¿Si eres hombre y te gustan las morenas? Otro, tan válido como el anterior.
¿Si eres hombre y te gustan los hombres? Emmmmmmmm....

Cualquier definición que se dé a la homosexualidad, por cierta que sea, les resulta ofensiva, y pronto delictiva. La homosexualidad ya sabemos que es el gusto por personas de un mismo sexo, pero ¿eso qué es? ¿Una mera opción? No lo sé, díganlo ustedes ¿Es como el gusto por las rubias? ¿Es una opción que un adulto se comporte como un niño? ¿Lo es que un hombre adquiera el rol de una mujer? Y es importante definirlo, porque nos da la clave de la naturaleza del asunto del que hablamos y de lo que es correcto o no.

Imaginemos que deducimos que la homosexualidad es una simple opción. Como el gusto por las rubias. Ningún problema. Pero si no es así ¿qué hacer? Veamos cómo afrontar cualquier problema, y que conste que no comparo gravedades, de la misma forma que si hablo de delitos puedo hacer mención al pirateo de CDs o al asesinato, y doy por hecho que ambas cosas no son iguales. Pues bien, ¿ante el alcoholismo hemos de llamar a la abstención o eso sería tener fobia a los alcoholicos? ¿Estaríamos al menos no comprendiéndolos? Otro ejemplo: quizás un hombre que adquiera el rol de un niño, si a pesar de ello trabaja, pueda vivir sin problemas. ¿Pero sería adecuado defender ese modo de vida, o habría que hacer un llamamiento a la sensatez? ¿Y si el problema es irresoluble, como algunos apuntan a que lo sea la homosexualidad? Pues pensemos en cualquier problema irresoluble ¿Adquiere por ello categoría de derecho? ¿Por no haber solución pensamos que ya no hay problema? Y si es evidente que existe, ¿acaso el afrontarlo es falta de misericordia o tan sólo la consecuencia lógica de aceptar la verdad?

Algo que pensar.

lunes, 3 de febrero de 2014

¡¡JORGE SE COME UNA MESA!!


Jorge se come una mesa y repite.

Ay, perdón, quiero decir que Jorge come en una mesa y repite.

¿Ambas frases vendrían a decir lo mismo? Porque si nos fijamos:

- Creemos en Jorge.
- Creemos que come.
- Creemos en la mesa.
- Creemos que repite.

Sin embargo el significado es totalmente distinto.

Algo así ocurre con la Fe Católica. Alguien, aún afirmando todos los dogmas, puede no tener la verdadera Fe o/y incurrir en incongruencias sorprendentes. Esto se debe a que los numerosísimos puntos del credo que profesamos pertenecen a una sola verdad, son hilados bajo una sola filosofía, parten de un sólo principio, y cuando éste se pudre con teologías bizarras, aires modernistas o ideologías incompatibles con Cristo, acabamos creyendo que somos tan católicos al afirmar que "Jorge se ha comido una mesa" como los que dicen que "Jorge comió en la mesa".

De ahí la importancia de guardar la Tradición y ser respetuosos con lo que siempre ha mantenido la Iglesia. Podemos alejarnos muy fácilmente de la Fe sin darnos cuenta. Quien sea observador reconocerá que es común ver a católicos (?) que, aún pareciendo que suscriben una misma doctrina, es evidente que creen cosas muy distintas. Como los que dicen creer en los dogmas pero reconociéndolos algo así como metáforas. O como los que dicen creer en Cristo pero afirman que se puede seguir igual a Dios a través de Buda. No me imagino a San Pedro diciendo que es tan válido creer en Cristo como en Apolo, en Júpiter o en el mismo Baal.

Aprovecho también para romper una lanza a favor del tomismo. Santo Tomás de Aquino, aún siendo lógicamente falible, ha sido un gigante que ha explicado la Fe Católica con una coherencia y fidelidad a Cristo únicas. Inspiración para Papas y para la Iglesia, su teología siempre se ha reconocido como un cemento que une magistralmente los ladrillos de la Fe. Que vuelva a los seminarios es una necesidad. Si no, acabaremos queriendo levantar muros con piedras y saliva.